Este Jueves pasado, Isaba ha perdido mucha de su memoria aunque, paradójicamente, mucha de su memoria se afirma más que nunca con la marcha de Sole.
Se ha ido Sole y se nos va un poco del pasado y un mucho del presente. Deja a cambio su recuerdo y, en la memoria de quienes le conocimos, siembra una memoria limpia, brillante, comprometida y alegre.
Agur Sole!